Treinta minutos y todo queda igual

Treinta minutos de juego no pueden dar para mucho puesto que, cuando ya empiezas a entrar en el partido, éste ya se ha terminado. Pero la verdad es que, aún con poco tiempo, algo se ha visto en el municipal cullero. Un gol anulado a los santaferinos y una oportunidad, ya casi con el partido concluido, en la que Santaella ha estado a pocos centímetros de llegar a un buen pase y darle a los de Figueroa los tres puntos.

Termina por fin el partido que tantos quebraderos de cabeza le ha traido a los culleros y que, visto lo visto en aquel de diciembre y en este de marzo, el empate ha sido, sin lugar a dudas, el resultado que ambos equipos se merecen y que, a los de Santa Fe los despega con cuatro puntos de diferencia sobre el Imperio y a los de Cúllar Vega les dá un colchón de diez puntos sobre los puestos de descenso.

Y ahora a vivir la Semana Santa con el trabajo hecho.